Octubre 2015 - Marzo 2016

Frases como esta fueron las que se encontró la artista Mónica Mayer en la realización de su obra "El Tendedero" para el Encuentro Internacional de Arte de Medellín, MDE15.

“Solo un grito me salvó de ser abusada a los 7 años”

Frases como esta fueron las que se encontró la artista Mónica Mayer en la realización de su obra para el Encuentro Internacional de Arte de Medellín, MDE15. Las mismas que halló en 1978 cuando le pidió a 800 mujeres que completaran “Como mujer, lo que más detesto de la ciudad es:”, para la pieza El Tendedero, que fue presentada en el Museo de Arte Moderno de la ciudad de México.

Foto: pintomiraya.com

Foto: pintomiraya.com

Mujeres de distintas edades, clases y profesiones respondieron en una hoja de color rosado. Gran parte de estas respuestas estuvieron relacionadas con la violencia sexual en las calles y en el transporte público. La pieza de tres metros de largo por dos de alto fue ubicada en una sala del Museo y a pesar de las exigencias que regularmente hay en estos espacios, pasó una cosa curiosa: las mujeres que se acercaban a El Tendedero empezaron a sumar sus propias experiencias. Cogían los papeles y les agregaban su historia en la parte de atrás o en pedazos limpios del papel que quedaban.

¿Hoy las respuestas serían distintas?

No.

A pesar de que han pasado 37 años desde la creación de esta pieza, la situación de las mujeres sigue siendo la misma. El acoso callejero, los piropos y el abuso sexual siguen presentes en su vida diaria.

Según Mónica Mayer: “La situación para las mujeres no ha cambiado mucho en términos de acoso y violencia, lo que ha cambiado es que hay una consciencia mucho mayor, que hay organización y grupos trabajando desde el arte”.

En Medellín El Tendedero fue reactivado de la mano de un equipo diverso, conformado por estudiantes de arte, artistas feministas, feministas y algunos hombres. Primero tuvieron un taller con Mayer sobre arte, feminismo y activismo, y posteriormente salieron a diferentes puntos de la ciudad, como el Jardín Botánico y la Plaza Botero, para recoger las historias de acoso hacia las mujeres, también en papeles rosados.

Las preguntas fueron:

¿Cuándo fue la primera vez que te acosaron? En esta respuesta la mayoría de participantes coincide en que el acoso comenzó desde muy pequeñas, tanto en la calle, como en la casa y en las instituciones educativas. También hay quienes aseguran que nunca se han sentido acosadas.

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¿Qué situaciones o comentarios te hacen sentir incomodidad en la calle?  En esta pregunta no solo hay acoso y violencia hacia las mujeres, también hay denuncias de racismo y discriminación.

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¿Qué has hecho para defenderte en contra del acoso sexual? Las herramientas usadas para la defensa son múltiples, y van desde las palabras, las denuncias, la violencia y hasta el silencio.

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Mónica Mayer hace parte del tema del MDE15 Dinámicas de poder sobre el cuerpo, que está ubicado en la Casa del Encuentro del Museo. La obra está abierta para que más personas la completen. En la sala están dispuestos los papeles rosados con las preguntas, para que quienes quieran compartir sus historias y denunciar.

Conferencia

La artista Mónica Mayer también realizó en el Encuentro Internacional de Arte de Medellín la conferencia Obras de  arte feminista en México, en la que relató su experiencia como artista feminista en ese país y la invisibilización o autoinvisibilización a la que son sometidas las mujeres en el mundo del arte. Narró además su experiencia con su proyecto Archiva, en el cual reúne 76 obras maestras del arte feminista en México, con la idea de contrarrestar esa invisibilización. La selección de estas obras abarca varias generaciones: desde las artistas de los años setenta que empezaron a participar en exposiciones de mujeres artistas o de arte feminista y llega hasta las generaciones más recientes de artistas feministas.

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*Sobre Mónica Mayer

Nació en Ciudad de México en 1954. Estudió Artes Visuales en la Escuela Nacional de Artes Plásticas de México y una Maestría en Sociología del Arte en el Rodar College en Estados Unidos. Hizo parte del primer grupo de arte feminista mexicano, llamado Polvo de Gallina Negra, en el que trabajaba con Maris Bustamante, en el cual analizaron la imagen de la mujer en el arte y en los medios de comunicación y promocionaron la participación de la mujer en el arte. En 1989 fundó junto con Víctor Lerma el proyecto Pinto Mi Raya, para crear un archivo hemerográfico especializado en artes visuales.

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