El cuerpo como escenario de representación

 


En la obra de Libia Posada se evidencia el carácter interdisciplinario propio de las practicas artísticas contemporáneas, que tiene la capacidad de sacudir fronteras entre el arte y otras practicas culturales y sociales. Libia Posada asume de forma radical esta condición al mantener simultáneamente su actividad profesional en dos campos separados la medicina y el arte.

 
 

 

Sus imágenes artísticas han puesto de presente, desde un comienzo, el posible cruce que tendría lugar entre estos dos saberes y que no es otro que el cuerpo, sus diferentes representaciones y las formas en que este es domado y construido por la cultura.  Sus proyectos adoptan un tono crítico y no pocas veces irónico, aunque no por eso desprovisto de belleza A lo largo de su producción ha establecido una serie de códigos ambiguos que evidencia la lógica del absurdo que atraviesa la ciencia.

 

 Libia Posada ha recurrido a diversos tipos de objetos, imágenes y procedimientos, de la práctica médica, para indagar sobre la experiencia del cuerpo entendido como territorio privado y al mismo tiempo como representación de lo público. Hemos visto transitar por su obra desde mobiliario e instrumentos quirúrgicos hasta medicamentos, gasa y otros materiales médicos. Sus obras han gravitado entre la dimensión del objeto hasta la situación de la instalación, las acciones colectivas y los ejercicios de inserción en el espacio publico. En ellas aparecen junto a los objetos antes citados, artefactos de otras procedencias e imágenes propias de la fotografía médica cruzados con rasgos y principios provenientes de medios más convencionales como el dibujo y pintura. En sus instalaciones el objetivo principal parecería ser el de ambientar el cuerpo de los espectadores con una diversidad de representaciones que reubiquen su propia experiencia perceptiva y su propia auto representación, como ocurre con su Sala de Examen, presentada en el Museo de Antioquia y en el Centro Colombo Americano de Medellín. En sus objetos, en particular aquellos que apelan a la experiencia imaginaria propia del dibujo o la pintura, su motivación parecería ser la identificación o contradicción que se produce entre los materiales y los referentes visuales que las obras aluden, como ocurre con la serie de dibujos, Neurografías.

 

        

 

En algunos de sus proyectos de instalación como Terapia Respiratoria Aguda y Sala de Rehabilitación ha trabajado con grupos de enfermeras las cuales permanecen en el espacio por ciertos periodos de tiempo, estableciendo un dialogo con los espectadores desde su propio saber, en torno en torno a la enfermedad. En el proyecto Evidencia Clínica ha trabajado en colaboración con mujeres afectadas por la violencia domestica y artistas forenses.

 

            
 

 

En otros proyectos como se ha apropiado de imágenes de circulación popular como en el caso de Lección de Anatomía II, o de circulación restringida como en el caso de Colombia: minas antipersonales para intervenirlas y luego insertarlas dentro de en el sistema callejero de venta y circulación de imágenes.

 

* Elaborado a partir de textos de Jaime Cerón, curador del encuentro MED 2007, Carmen Maria Jaramillo, investigadora y Libia Posada.

 

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