Una reflexión irónica sobre la situación política en Suramérica es la base de la propuesta que trabajara la artista brasileña Dora Longo Bahía en el Encuentro Internacional de Medellín. Su trabajo consiste en la realización de un dramatizado sonoro que aborda la fragilidad de los límites entre la ficción y la realidad, la seriedad de la figura de los medios de comunicación con la inverosimilitud de las acciones que relatan: “la ficcionalización de las relaciones”, dice, “la realidad se tornó ficción.”
‘La guerra de los mundos’, título de su trabajo, se construye a partir de la radionovela que Orson Welles realizara en 1938, quien, a su vez, se basara en la novela homónima de H.G. Wells. La versión que se realiza para el MDE11 presenta un mundo invadido no por extraterrestres sino una América del Sur ocupada por soldados norteamericanos, quienes son vistos como “aliens” para jugar con el mismo término que ellos, según la artista brasileña, usan para denominar a los extranjeros: la dominación, aunque no se hace con naves espaciales, se lleva a cabo por medio del mercado.
Se trata de una idea de ficción que al mismo tiempo evidencia una carga política. El arte, dice, posee una responsabilidad política, mas no panfletaria. Su trabajo acude a la idea de ficción, un género que se viene explorando con mayor intensidad en la contemporaneidad, para iniciar asesinando al expresidente cubano Fidel Castro y terminar cercando la ciudad de Medellín, una metáfora de las relaciones entre los gobiernos del continente americano.
Acerca de la propuesta curatorial ‘Enseñar y aprender, lugares del conocimiento en el arte’, Dora expresa que no basó allí su trabajo porque no quería hacer algo superficial: “no se trata de enseñar técnicas ni de mostrar métodos. Eso no es arte.” Considera que la enseñanza alrededor de las artes puede ser un acto de riesgo, dado que es una disciplina contradictoria, responsable e irresponsable al mismo tiempo.