Las obras del Museo de Antioquia… una visita guiada
No pretende descubrir una realidad novedosa sino señalar un lugar común
Antonio Caro (Bogotá, 1950) es uno de los principales representantes del Arte Conceptual en Colombia. Esta tendencia que, de manera general, puede definirse como un arte de ideas, se consolidó en el plano internacional a finales de los sesenta con la afirmación de que es más trascendental el significado de la obra de arte, su dimensión conceptual, que el desarrollo material o artesanal de los elementos que la configuran.
Todo está muy caro, con su apariencia de cartel de propaganda es, en realidad, un grabado en xilografía -es decir, estampado a partir de una matriz de madera-, intervenido a la acuarela, que Antonio Caro produjo en 1978. Fueron 40 ejemplares, de 65,8 por 49,8 centímetros, que revelan nuevos objetivos y nuevas concepciones del arte.
Lo primero que salta a la vista en la obra de Caro es la sencillez de su presencia, apenas un papel de propaganda totalmente alejado de la belleza que revelaba el arte tradicional. Pero, al mismo tiempo, son evidentes sus vínculos con aspectos que los ciudadanos entendemos como los fundamentales de la realidad económica y social. Se manifiesta aquí una postura de crítica política que viene a reforzar la conciencia de que nos encontramos frente a un arte que tiene como objetivo debatir ideas, poner en ellas toda su fuerza, y no se entretiene en los juegos de los oficios manuales o de la artesanía.
Que todo está muy caro es un justificado lugar común dentro del lenguaje coloquial de los colombianos. En efecto, cuando los estándares oficiales definen niveles tan bajos para calificar la miseria y la pobreza, es decir, cuando se requieren ingresos tan escasos para “dejar de ser pobre” en las estadísticas, casi todos debemos repetir a diario que todo está muy caro. En ese sentido, Antonio Caro no pretende descubrir una realidad novedosa sino señalar un lugar común y, a partir de la intuición, hacernos reflexionar sobre él o, al menos, lograr de nosotros una adhesión espontánea a su idea.
Por otra parte, es también evidente que Caro se sirve de su propio apellido para generar otro contexto de reflexión que tiene que ver con su concepción estética. Además de la crítica política, Todo está muy caro puede leerse como la afirmación de que en el ámbito contemporáneo el arte se despliega en una línea como la que plantea Antonio Caro, es decir, como ese arte de ideas y conceptos que, sin embargo, no se detiene en la esfera de la abstracción sino que se encarna intensamente en la vida real.
El proceso de las últimas décadas confirma de manera clara aquella insinuación conceptual de Antonio Caro en 1978 y refuerza su vigencia.
En el Encuentro de Medellín 07, en la Casa del Encuentro -antigua sede del Museo-, se presenta una amplia retrospectiva de Antonio Caro.
Periódico Vivir en El Poblado, Medellín, edición # 342, Mayo de 2007, página 18