Arte contemporáneo en las calles de Medellín
“La hospitalidad consiste en hacer todo lo posible para dirigirse al otro” Jacques Derrida
Lucía González Duque
Directora Encuentro Internacional Medellín 2007
Medellín ha sido una de las ciudades pioneras en Colombia y Latinoamérica en la difusión del arte contemporáneo. Las Bienales de 1968, 1970, 1972 y 1981, el Primer Coloquio de Arte no Objetual en 1981, los salones Rabinovich liderados desde el Museo de Arte Moderno de Medellín, y el Festival Internacional de Arte de 1997, abrieron la ciudad al mundo, a lenguajes y modos completamente nuevos, incidiendo no sólo en el arte y la cultura de una ciudad encerrada en sus montañas circundantes, sino en la manera misma de vernos y vernos frente a un mundo, que hasta entonces era muy lejanos para nosotros. Podemos decir, que las primeras Bienales nos hicieron entender que el mundo “era ancho y ajeno”, saber que era necesario tener a la altura de mediados de siglo XX.
Estas actividades contemporáneas dieron origen a muchas otras expresiones y ante todo a la creación de las facultades de arte en la ciudad, que han enriquecido con su trabajo de formación, con el trabajo de sus egresados y con su labor de extensión, la vida cultural de la ciudad, la conversación, la producción artística local.
Por razones de la violencia que vivió la ciudad, y seguramente también porque el espíritu parroquial sigue anclado en nuestra manera de hacer las cosas, y por lo tanto el contacto con el mundo no fue por mucho tiempo un propósito de la dirigencia, y menos de la dirigencia cultural, la ciudad dejó de realizar actividades de intercambio de gran envergadura. Es de destacar el esfuerzo que representa mantener en la ciudad una temporada de Danza Contemporánea, que trae la ciudad lo mejor de la danza del mundo, y el aporte que el Festival Internacional de Poesía ha hecho. Pero es de destacar también que a la ciudad no ha llegado casi ninguno de los artistas colombianos contemporáneos que hoy nos representan en el mundo, por consiguiente, mucho menos artistas contemporáneos internacionales han estado en Medellín de los últimos 30 años.
Mas allá de las élites artísticas
En la ciudad egresan anualmente más de 200 artistas de las Facultades de arte y los espacios de exposición son casi inexistentes, y no hay relación con los circuitos nacionales e internacionales de arte. Sin embargo la educación y la cultura han logrado un status en muchos ámbitos de la sociedad, mucho más allá de las tradicionales élites, debido a un trabajo continuo de muchas entidades culturales y especialmente universitarias, a la circulación de la cultura en los medios de comunicación, al acceso democrático que permite el Internet, y al espacio que ocupan hoy los programas educativos y culturales en los programas del gobierno local especialmente. En el sentimiento de muchos estaba de todas maneras la necesidad de recuperar la tradición y vocación que iniciaron las Bienales.
A este panorama se suma un momento histórico para la ciudad, en el que la confianza entre los sectores público, privado, cultural y social permite un trabajo mancomunado, y hay en el imaginario y en cifras del desarrollo una situación que permite tener la certeza que esta ciudad transita del “miedo a la esperanza”
Surge MDE07
Es así como entre un grupo importante de entidades culturales en principio, se plantea la idea de realizar un gran evento de arte, que nos permita reconectarnos con el mundo, vernos en los demás, en los invitados que vendrían a compartir con nosotros sus experiencias, hacer visible nuestra ciudad y nuestro trabajo artístico y nuestro patrimonio vivo. Nace entonces a finales del 2005 el Encuentro Internacional Medellín 07/ Prácticas artísticas contemporáneas.
Bajo el liderazgo del Museo de Antioquia y una apuesta inicial de la Alcaldía de Medellín, se convoca un Comité Promotor y Gestor del Encuentro, conformado por: Ministerio de Cultura, Ministerio de Relaciones Exteriores, Gobernación de Antioquia, Idea – Instituto Para El Desarrollo De Antioquia, Banco de La República, Instituto Distrital de Cultura y Turismo De Bogotá, Bancolombia, Suramericana de Inversiones, Cementos Argos, Grupo Nacional de Chocolates, Comfama, Comfenalco, Parque Explora Medellín, Museo de Arte Moderno, Centro Colombo Americano, Alianza Francesa, Universidad Eafit, Universidad Pontificia Bolivariana, Universidad Nacional de Colombia, Universidad de Antioquia, Fundación Universitaria Bellas Artes, Colegiatura Colombiana, Universidad San Buenaventura, Biblioteca Pública Piloto, y Lugar a Dudas de Cali.
Se invita luego a un grupo de curadores con gran conocimiento del movimiento contemporáneo en el mundo: Jaime Cerón, curador del IDCT de Bogota; José Ignacio Roca, curador del Banco de la República de Bogotá; Ana Paula Cohen, curadora de Sao Paulo; María Inés Rodriguez, curadora bogotana con residencia hace más de una década en Paris y el artista caleño Oscar Muñoz, director de Lugar a Dudas; junto con Alberto Sierra, curador del Museo de Antioquia, para que diseñaran lo que hoy es una novedosísima manera de poner lo actual del arte en escena, con el propósito de que en un tiempo muchos mas largo que el habitual de las Bienales, hubiera de verdad la oportunidad de dejar sembrados conocimientos, inquietudes y relaciones, que produjeran frutos durante mucho tiempo, propiciando espacios de formación, de diálogo, de intercambio, de trabajo conjunto.
El tema central elegido, “la hospitalidad”, guía no sólo la temática bajo la cual se eligen y miran las creaciones artísticas, sino el modo como se plantea la permanencia de los artistas en la ciudad, el cruce de los extranjeros con los artistas locales, de todos con los colectivos de la ciudad, con la gente de los barrios, de las universidades. Y se propone estar atentos a vernos en el otro, al descubrimiento que se visitante hace de nuestro propio entorno, ayudándonos muchas veces a ver lo que no habíamos visto antes o a verlo de otra manera.
La otra ciudad después del MDE07
Todo ello ya ha empezado a pasar en la ciudad, de un modo menos estruendoso de lo que tradicionalmente sucede cuando se habla de grandes eventos, pero seguramente de un modo más humano, más cercano, más profundo. Ya hay artistas de muchas partes del mundo, nacionales y locales, recorriendo las calles, los barrios, las plazas, proponiendo trabajo con los tatuadotes, con las estatuas humanas, con las comunidades marginales, con otros artistas, con académicos. Y hay propuestas en los museos, en las universidades, en las quebradas, en el espacio público, en la huerta de una universidad. Hay conversaciones informales y formales en las que aprendemos siempre cosas nuevas. Y nos sorprendemos.
Y hay una agenda académica de curaduría, de diseño editorial de mobiliario, de guías, que permite a grupos interesados ahondar en sus saberes. Y seminarios especializados, como la Cátedra Pedro Nel Gómez, propuesta por la Universidad Nacional, o El Encuentro en Teoría; Seminario taller de paisaje en nuevas Tecnologías, así como ciclos de cine sobre hospitalidad y su contrario, la hostilidad, y conciertos de nuevas experiencias sonoras. Hay programas de radio y columnas de prensa, programas de televisión, entre otras actividades que logran contaminar a muchos públicos, y que seguramente permitirán transformar la mirada sobre la ciudad, sobre nosotros mismos, sobre el arte
Pretendemos llegarle a mucha gente, hacer de esta una oportunidad democrática de acceso a saberes, a propuestas, a lo actual.
De enero a junio, el arte contemporáneo del mundo estará presente no sólo en los museos, sino en la ciudad entera, gracias al apoyo de las entidades gestoras y promotoras, y de otras empresas públicas y privadas que han creído en la importancia de este Encuentro que nos propone vivir de manera más vital el presente antes de que este se convierta en certeza, en historia, y podamos en el debate, en la creación misma, hacernos preguntas sobre la vida, la ciudad y la convivencia, ente muchas otras.
Periódico El Mundo, inserto Palabra y obra, Medellín, 13 de abril de 2007