La obra de Ana Claudia Múnera es una búsqueda potenciada por los amigos fuertes en el medio desde la U. Es una niñita mimada que ni siquiera ha tenido que devanarse los sesos, pues ella como muchos otros de los figurantes del arte colombiano, siempre ha tenido muchos asistentes entre profesores y obreros del arte. Ella siempre ha sido pobre de ideas. En este MDE07, le dió por aprovecharse de los venteros ambulantes, que viven su drama diario, drama que por supuesto a ella le importa un pepino, pues su interés primordial es dar con una obra espectáculo, que aparente ser muy social y que tenga los componentes de moda en el arte, ejemplo, el performance. Cualquiera que ve la actitud de esta artista, se da cuenta inmediatamente que no posee ningún grado de humildad (humildad de guerrero), al contrario, posee la arrogancia común del pequeño burgués, acostumbrado a consentirse y a esperar de los otros lo mismo. En el caso de la obra en mención, simplemente hizo uso de lo mas fácil, que es utilizar el presupuesto que le asignaron, y les pagó a los humildes venteros para ser utilizados como material de la obra de arte, algo parecido a lo que hace Santiago Sierra cuando contrata gente, pagando el mínimo del país a donde valla a trabajar, para utilizarlos como materia de arte. Contribuyen así a la deshumanización tan de moda hoy (arte "Contemporáneo"). Es falso eso que ella dice de "DIGNIFICAR" a los venteros invisibles para el transeúnte y muy visibles para los vigilantes del Espacio público. La obra de Múnera no contribuirá para nada a cambiar la conciencia, ni mejorará tampoco la vida del sector informal. Sólo le servirá a ella para justificar un poco, su mediocre carrera de artista, con una participación mas en el arte manejado por el curubito de nuestra región. Es lo que entendemos por la vigencia. Supuestamente un artista vigente es el que aparece constantemente en exposiciones, los otros no existen, son tan invisibles como los venteros ambulantes.