“Dejamos que las cosas fluyan”

 

El colectivo Helena Producciones fue fundado en 1998 por Wilson Díaz, Ana María Millán, Andrés Sandoval, Claudia Patricia Sarria y Juan David Medina, con el objetivo de explorar una propuesta independiente para la producción y difusión del trabajo artístico en el país. Se catalogan a sí mismos como una organización de artistas sin ánimo de lucro, que constituyen un grupo interdisciplinario con el fin de desarrollar actividades como ferias y festivales de performance, curadurías, conferencias, talleres, videos, ciclos de cine, publicaciones y una serie de “fiestas/exposiciones” que realizan en diferentes bares de la capital del Valle desde finales de los 90

 

 

Por: Sol Astrid Giraldo y Conrado Suárez
La presente entrevista fue realizada por el programa el Citófono de Medellín y editada para ser publicada por ARTERIA.

 

Citófono: Helena Producciones es reconocido en el ámbito nacional por el Festival del Performance, de hecho acaban de editar un libro sobre este evento que ustedes están liderando, pero ¿Qué es Helena Producciones?

Helena Producciones: Helena Producciones se conforma como grupo en 1998, es una asociación de artistas, legalmente constituidos. Nosotros tenemos unos antecedentes bastante específicos, que tuvieron su origen en la Escuela de Bellas Artes de Cali y fue cuando Juan Mejía trabajaba con Wilson Díaz, y llegaron de Bogotá a Bellas artes en Cali, con las ideas de autogestión y comenzaron a organizar exposiciones con nosotros que éramos los alumnos de entonces. Hicimos una exposición que se llamó “Sin título” en una antigua pizzería de la ciudad, presentamos ciclos de cine y la casa se fue activando con encuentros y charlas y se hicieron varias exposiciones en el instituto de Bellas Artes y como resultado de este trabajo se decidió hacer el Festival de Performance en 1997. En ese momento la gente estaba haciendo muchos perfomances y no había ni un espacio para presentarlos, ni una clase para abordar este tipo de manifestaciones y por eso se organizó esta primera muestra, en una bodega. Se invitó a todo el que quisiera participar y sin ninguna clase de selección se realizó una programación. Eso propuso una forma que sigue perdurando en el festival, que es la jornada del día del Perfomance. El primer festival tuvo tan alto impacto sobre la ciudad frente al arte y generó tantas posiciones que abrió nuevos caminos de exploración para el arte, y por eso, para seguir con el grupo de trabajo que ya estaba conformado, decidimos conformar la ONG.

 

C: ¿Cómo opera Helena Producciones?
H: Helena Producciones muta con el tiempo, a veces aprovechamos la forma de la ONG, pero también se adapta a la forma de otros proyectos como colectivo más informal. Así como no tenemos una sede fija, así mismo aprovechamos ciertas formas para desarrollar las propuestas.

 

S: Es importante que empecemos con algo muy básico, que empecemos por definir que es el Performance, y específicamente cuales son sus límites frente a otras formas de expresión como el teatro, la música.
H: Yo creo que el performance tiene un discurso y una historia, pero con nuestra experiencia cada uno se va apropiando de un concepto más cercano y creo que la idea no es tanto repetir la historia, sino más bien lo que cada uno ha capturado en el festival. Nosotros no hemos hecho un acercamiento al perfomance desde el concepto y la definición académica sino que es algo que se ha ido construyendo dentro de nuestro contexto, dentro de nuestro entorno. Yo hablo del artista que utiliza un lenguaje y se pone en escena, y donde el elemento principal es el cuerpo y parte de la reacción de los demás. Es importante lo que el transmite pero también es lo que el público le puede brindar.
Hay otro término que me parece bonito con el performance que es el de arte vivo. Así como en la pintura y en la escultura hay materiales muy definidos, en el perfomance se da el lujo de agruparlo todo y de apropiarse de cualquier lenguaje que pertenezca a otro conocimiento, así que tiene esta posibilidad diversa, que integra. No es obra de teatro, aunque parte de la experiencia de estar en vivo. No es algo que sea ensayado, preparado, aunque a veces usa estas formas predeterminadas para generar reacciones. El Performance es algo brusco porque irrumpe, porque irrumpe en la susceptibilidad de los otros para afectar. Es una expresión más fresca.

 

S: Ustedes en los últimos años han tenido la oportunidad de ver el pulso de las nuevas propuestas del performance. ¿Qué han visto ahí?
H: La idea de Juan y Wilson cuando empezaron con el performance no era una cátedra, pero si era estimular una forma de expresión que ya tenía sus manifestaciones en los salones nacionales. Lo que Helena Producciones viene a aportar es la investigación sobre el performance como lenguaje, y poder proponer obras para que los artistas, teóricos y público tengan un espacio para profundizar en esta manifestación.

 

S: ¿También desarrollan otras actividades académicas paralelas?
H: Nuestra actividad paralela es un centro de documentación pero también hacemos conferencias y encuentros de indagación. El Festival empezó como el encuentro de un día, con performances de diferentes duraciones, algunos con caracteres más rituales y otros más paganos, otros que incluyen más al espectador. Con el avance del festival le hemos añadido conferencias de artistas y estudiosos del tema y ha sido muy chévere porque en el quinto y sexto festival hemos tenido talleres que son obras de arte, trabajos con artistas, que se incluyen como plataformas de comunicación, talleres que incluyen al público como formas de expresión artística y todo se va mezclando.
Hemos trabajado en la construcción de públicos, antes no estaba planteado de esa manera, pero hemos ido incorporando jornadas pedagógicas con colegios e intervenciones en el espacio público y cerramos con conferencias y talleres, donde los mismos artistas funcionan como escuelas abiertas al público como propuestas artísticas.

 

 

C: Ustedes en este trabajo se proponen también como colectivos curatoriales. ¿Cuáles son las líneas de trabajo, los criterios de selección de la convocatoria, cuándo se hace y cuánto dura este festival…
H: A Helena producciones como organización le ha tocado aprender como funcionar para que un evento se vaya dando. Porque a medida que crece va generando nuevas formas de asumirlo. No era lo mismo la reunión de unos alumnos en un billar que la estructura que demandan los festivales más recientes, porque entonces entrar a jugar aspectos económicos y mucho más cuando nosotros hemos tratado de favorecer a los artistas. Entonces esa responsabilidad ha generado que seamos más abiertos a consideraciones sobre cómo exponer la obra, como abrirnos al público. No ha sido fácil y nosotros mismo nos hemos cuestionado y contrastado diversas teorías sobre cómo presentar la obra. Así que el festival ha ido en un progresión que incluso nos ha rebasado porque implica mucha labor de administración, que es muy exigente, aparte de la labor curatorial y creativa, y es muy difícil para un grupo de artistas que no tiene esa formación. Dado estos antecedentes, el evento se dejó de hacer cuatro años porque decidimos coger el evento no solo curatorialmente sino desde lo administrativo. Entonces fue como un proceso de separación, de diálogo y luego de conciliación para retomar el proyecto. Todo vuelve a partir de un viaje de Ana María y Wilson a Londres, para generar alianzas con diferentes entidades culturales y artísticas. Al principio no quisieron ayudarnos, pero cuando insistimos, obtuvimos el apoyo de Prince Clauss. Y fue así como en el 2005 retomamos el festival.

 

C: ¿Siguen alguna línea particular desde lo conceptual para orientar el evento?
H: Esencialmente dejamos que las cosas fluyan y con la experiencia de cada festival lo vamos aplicando en el siguiente. Es importante decir que todos tenemos un trabajo individual a nivel profesional y cada uno trata de mirar problemas presentes en el arte para aportarle elementos al festival. Por ejemplo, con la experiencia que tuvimos con la Escuela de Esgrima con Machete de Puerto Tejada, nosotros para el regional de artistas del pacífico encontramos a la Escuela y fueron invitados después para el Festival del Peformance y así tratamos de mirar problemas. También hay que ver que los perfomances que se presentan son resultados de trabajos que no son del momento sino de un proceso. Otra cosa, en algunos festivales se definieron algunos jurados e invitados para la selección de las propuestas.

 

S: ¿Ustedes ya han pasado de ser una experiencia local a ser una convocatoria nacional e incluso internacional?
H: Antes llamábamos a invitados internacionales pero ahora son ellos los que nos llaman para participar porque se interesan por la propuesta del Festival, que ya se ha convertido en un lugar para el desarrollo de sus propuestas y desde el tratamos de conciliar los recursos. De hecho hay invitados que gestionan los recursos con entidades culturales para participar en el festival.

 

C: Fechas para los próximos eventos?
H: Tenemos pensado realizar el próximo festival para el 2008. Y siempre es una convocatoria abierta. Las bases se pueden encontrar en la página web: www.helena producciones.org. Incluso Helena va enriqueciendo su festival con las participaciones con las experiencias en otros Encuentros de Artes como este en Medellín, con la vinculación de otras instituciones.

 

Revista Arteria, Bogotá, Año 2 # 10, junio – julio de 2007, páginas 6 y 7

 

 

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